El Abuelo de vez en cuando visita el huerto, no puede resistir la tentación de seguir respirando el olor de las plantas, ver como se van desarrollando o dar sus sabios consejos.
Aquí con el ayudante mayor ( Oxigenito ), lavando unas zanahorias para degustarlas acto seguido.
1 comentario:
Ole por el abuelo ¡¡¡¡¡¡¡¡
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